¿Cómo estudiar en Harvard con beca?
Esta es la pregunta del millón para muchas familias cuyos hijos destacan a nivel académico. Pero, como vamos a explicar a continuación, la cruda realidad no es tan simple puesto que intervienen muchos otros factores que hacen que no siempre aspirar a Universidades Ivy League sea la mejor estrategia. El sueño anhelado de todo progenitor es ver a sus hij@s emanciparse con 21 años, y eso no solo es perfectamente posible sino que además está garantizado, si se elige la carrera y la Universidad adecuadas en USA (que no necesariamente tiene que ser una Ivy League sino una TOP 100). Pero empecemos por el principio:.
¿Cuáles son las universidades Ivy League?
Ivy League propiamente dichas hay solamente 8 y todas ellas privadas: Harvard, Yale, Princeton, Columbia, University of Pennsylvania, Brown, Dartmouth y Cornell. No obstante, como se explica en el artículo titulado “Universidades Ivy League, Ivy League Plus y Nuevas Ivy League” hay unas cuantas más, conocidas como Ivy League Plus, que ya no están circunscritas a la coste Este (el origen de las universidades en los EE.UU.) sino por todo el país. Entre ellas encontramos también nombres ilustres como Stanford, MIT, Johns Hopkins, CalTech, University of Chicago, Northwestern, Duke, Vanderbilt, Rice o Washington University. Además también hay una lista de Ivy League Públicas, equivalentes en prestigio, como por ejemplo algunas de las University of California (UCLA, UC Berkeley…), University of Virginia, College of William & Mary, University of Michigan Ann Arbor, University of Texas Austin, entre otras.
Por tanto, existen docenas y docenas de universidades con un nivel académico y de prestigio tan alto como la dificultad para ser admitido en ellas y que ni siquiera se catalogan oficialmente como Ivy League, aunque por lógico desconocimiento, la mayoría de familias se centran exclusivamente en las archiconocidas Harvard, Stanford o MIT. Para saber distinguir entre las universidades TOP 50 o TOP 100 y las universidades mediocres, y los rankings fiables de los que no lo son, es imprescindible que leáis: “Ranking de las mejores Universidades: Toda la verdad“
¿Es posible estudiar en Harvard, MIT o Stanford con beca?
El sueño de muchos estudiantes españoles de ESO y Bachillerato es ser admitidos en Harvard, Yale, Stanford, MIT, Priceton, Columbia, etc. Y el sueño de muchos padres y madres es que sus hij@s estudien en dichas universidades TOP con becas generosas, que les permitan enviarlos a una Ivy League por poco dinero. Y es que en muchas webs pseudo-especializadas e incluso en algunas webs oficiales de dichas universidades se publicita precisamente eso, que los alumnos serán admitidos sin importar la capacidad económica de sus familias. Eso genera a muchas familias unas falsas expectativas que les llevan a embarcarse en procesos de aplicación más o menos costosos pero sin posibilidades de éxito. Además, la maraña de conceptos y nomenclaturas en el campo de las ayudas financieras universitarias contribuyen aún más a la creencia de que es fácil estudiar en Ivy Leagues por poco dinero. En primer lugar vamos a aclarar los distintos criterios de selección y potenciales becas de las que hablan agencias y universidades puesto que pueden resultar muy confusos para las familias:
¿Qué es need-based, need-blind, need-aware, student loans, merit-based financial aid o scholarships?
Es cierto que algunas universidades top como Harvard utilizan criterios de admisión need-blind también para estudiantes internacionales, es decir que no tienen en cuenta para nada si los aspirantes que admitan van a necesitar una beca o no para poder cubrir el coste de sus estudios. O sea que, en caso de que el aspirante merezca ser admitido y no disponga de recursos, la universidad le otorgará una beca need-based que cubra la parte de los costes que la familia no pueda alcanzar. Pero ojo, para ello la familia del aspirante admitido deberá justificar mediante documentos oficiales (declaraciones de renta y patrimonio) que efectivamente sus ingresos son muy insuficientes para cubrir los estudios de su hijo o hija. Además, en la práctica, estos casos de becas need-based se dan de manera muy excepcional en universidades top, ya que la inmensa mayoría de aspirantes sin recursos no dan la talla suficiente académicamente para conseguir la admisión. O dicho de otra manera, la inmensa mayoría de estudiantes que aplican justificando unos ingresos suficientemente bajos, son rechazados por razones puramente académicas, puesto que en el mundo hay muchísimos pequeños genios procedentes de familias muy humildes que compiten por un puesto en las mejores universidades del mundo.
El resultado en la inmensa mayoría de los casos es que son rechazados académicamente, pero lo peor es que sus familias habrán gastado inútilmente sus escasos ahorros en un proceso de aplicación que requiere de una ayuda profesional. Y es que sin esa ayuda profesional especializada en aplicaciones a universidades top o Ivy League (que no es barata en absoluto y que jamás cubren las becas universitarias) las posibilidades de admisión son absolutamente nulas. Por lo tanto, es poco recomendable embarcar a familias con escasos recursos económicos en procesos de aplicación tan complejos y caros como los que son necesarios para poder conseguir admisiones en Harvard y similares. Porque a pesar de que sus hijos sean académicamente brillantes y opten a becas need-based, lo más probable es que sean rechazados y hayan quemado sus ahorros inútilmente.
Si no lo habéis hecho ya, os recomendamos leer nuestro artículo sobre las becas titulado “Estudiar en EE.UU. con beca: Toda la Verdad“, en el que explicamos la cruda realidad de las becas universitarias en USA. Y también el que habla específicamente de la verdad de las becas deportivas.
Por el contrario, las universidades need-aware son todas aquellas que sí tienen en cuenta la capacidad económica de la familia del alumno, especialmente del internacional, a la hora de decidir su admisión o rechazo. Por tanto, ante igualdad de perfiles, siempre tendrán más probabilidades de admisión aquellos candidatos que NO necesiten becas. Este criterio es utilizado por la mayoría de universidades norteamericanas, aunque muchas de ellas no lo reconozcan oficialmente.
Los student loans son los préstamos que empresas americanas especializadas otorgan a los estudiantes cuyas familias avalan dichos créditos. Los tipos de interés suelen ser muy elevados (cercanos o superiores al 10% anual) y además difícilmente se conceden a extranjeros, puesto que exigen avaladores con patrimonio que estén radicados en los EE.UU. Por tanto, si un estudiante español se plantea “tirar de crédito”, sin duda la mejor opción es que su familia obtenga una hipoteca o amplíe una existente sobre un inmueble de su propiedad en España.
Las merit-based scholarships son las becas académicas, siempre parciales y cuyo importe irá en función de múltiples variables: Nivel académico del alumno en relación al nivel académico del promedio de los alumnos de la universidad, fecha de aplicación, calidad y cantidad de documentos aportados en la aplicación (aquí es esencial ir de la mano de consultores especializados), tipo de carrera elegida, precio de la universidad, notas, cantidad de aplicantes, etc. Son las ayudas más frecuentes y todos nuestros alumnos obtienen varias de ellas, pero aún así el coste neto para estudiar en una buena universidad en USA difícilmente bajará de los 30-40,000 dólares anuales todo incluído, como mínimo. Lógicamente ese nivel de coste no incluye universidades como Harvard o las Ivy League, pero sí que a partir de ese precio podemos encontrar ya otras universidades de categoría 6, 5, 4, 3, 2 o incluso algunas de 1a categoría. Para ver las diferentes de categorías universitarias y tipos de procesos de aplicación podéis descargar aquí la “Guía para estudiar una carrera en USA“.
¿Cuánto cuesta una buena universidad en Estados Unidos?
Siempre que la universidad esté entre las mejores TOP 50 o TOP 100 merecerá la el esfuerzo económico y familiar. Sin embargo, hay que huír de las universidades en puestos más allá del TOP 100, cuyos precios después de deducir las becas están por debajo de los 20,000 anuales, pero que no son para nada recomendables.
Lógicamente las de ranking TOP 100 suelen ser más caras que las de los puestos 150 o 300, pero hay honrosísimas excepciones incluso en el TOP 25 por menos de 50,000 dólares anuales, todo incluído. El límite inferior de precios, con una calidad que merezca la pena, estaría en un mínimo de 40-45,000 anuales. Sin embargo, las más caras (y no necesariamente las mejores) pueden superar ya para el año 2024 los 90-95,000 anuales.
En los casos de presupuestos anuales limitados (pero siempre superiores a los $45,000) merece la pena realizar el esfuerzo de pagar especialistas en aplicaciones de alto nivel. Ir de la mano de buenos consultores permitirá a las familias presentar múltiples aplicaciones potentes y aspirar a becas académicas parciales. Dichas becas, si el alumno tiene un buen nivel académico, le permitirán estudiar en universidades de 70 mil por 50 mil o en universidades de 50 mil por 40 mil, por ejemplo, y además con varias admisiones garantizadas. Es la mejor herencia que unos padres pueden dejar a sus hijos en vida, y las razones irrefutables las podéis leer en el artículo “España no es país para jóvenes“.
Si todo ello es así, entonces la siguiente pregunta del millón que debemos hacernos es:
¿Por qué la mayoría de agencias prometen prestigiosas admisiones y cuantiosas becas?
Por puro marketing. En primer lugar, la mayoría de agencias cobran unos honorarios del todo insuficientes para realizar procesos se aplicación competitivos, a pesar de sus promesas. A la hora de la verdad dejan a los aspirantes a su suerte, puesto que los honorarios que les han cobrado no permiten la dedicación y atención especializada y personalizada que requieren las aplicaciones a las universidades de alto nivel, si se pretende tener posibilidades reales de admisión. Tened en cuenta que presentar múltiples y potentes aplicaciones a universidades de buen nivel requieren muchísimas horas y muchos meses de trabajo, clases particulares intensivas con tutores individuales en directo durante meses y meses para conseguir las mejores notas en los exámenes oficiales (SAT y Toefl), y una implicación absoluta, tanto por parte del alumno como por parte de los consultores. Y unos honorarios de 2, 3, 4 o 5 mil euros no van a permitir dicha atención permanente y especializada sino un mero soporte administrativo y muy poquito más.
¿Y cómo evolucionan esos procesos de aplicación baratitos y mediocres? Pues ante los más que previsibles rechazos de las universidades de alto nivel, la mayoría de agencias “redirigen” entonces a sus incautos y decepcionados alumnos hacia universidades de medio pelo (en los puestos 150 o 200 del ranking), como explicamos en ¿Cuánto cuesta estudiar en Estados Unidos?), que además ofrecen generosísimas becas a todo quisqui, puesto que en el fondo son universidades muy baratas y muy cutrecillas. Aquí podréis ver las “Diferencias entre las Universidades TOP 100 y el resto“.
¿Cuánto cuesta una agencia o Consultor Universitario?
Esos procesos de aplicación a universidades de bajo nivel no requieren de especialistas ni de preparación ni atención personalizada, ya que son meros trámites burocráticos sencillitos y rápidos. Por tanto, las agencias terminan colocando en universidades cutres y facilonas a sus alumnos (que en realidad es su nicho o especialidad), sin importarles que esas pseudo-universidades tengan un nivel académico MUY inferior al que merecerían sus alumnos. Para esos meros procesos burocráticos los honorarios, que suelen ir de 2.000 a 5.000 eur, cobrados por la mayoría de agencias son más que suficientes o hasta caros, ya que realizan estas simples inscripciones como churros. Y además, muchas agencias incluso cobran comisiones de esas universidades de bajo nivel, que están ávidas de estudiantes internacionales puesto que suelen tener un nivel académico muy superior al promedio de sus alumnos. No nos engañemos, los consultores universitarios que cobren menos de 12-15.000 euros durante el año o dos años que debe durar un buen proceso de aplicación (en Reino Unido suelen cobrar más de 20-25,000 libras) no deben considerarse consultores universitarios sino meros tramitadores de expedientes académicos. Y esas agencias que realizan simples trámites suelen conseguir admisiones limitadas a pseudo-universidades muy mediocres. Podéis leer más sobre las diferencias entre consultores universitarios y agencias de medio pelo en “Las mejores agencias para estudiar en Estados Unidos“.
Resumiendo, las familias con recursos limitados, es decir, las familias que no dispongan de al menos 12 o 15,000 euros para pagar unos buenos consultores universitarios especializados, y unos 30 o 35,000 anuales para cubrir todos los gastos universitarios de sus hij@s durante 4 años, NO deben dejarse llevar por los cantos de sirena de agencias baratas que prometen estudiar en Harvard con beca.
La cruda realidad es que, lamentablemente, con presupuestos inferiores a las cifras mencionadas, acabarán sí o sí en pseudo-universidades de muy bajo nivel académico y escasa o nula vida universitaria. Y para cuando los padres se dan cuenta de que han sido rechazados en sus universidades preferidas, y que las universidades a las que sutilmente les derivan las agencias son muy inferiores a las prometidas y que merecen sus hijos, el calendario se les ha echado encima y es ya demasiado tarde para iniciar un buen proceso de aplicación con auténticos consultores universitarios especializados.
Cada año llegan a nosotros muchas familias en esas mismas circunstancias que, decepcionadas con las admisiones conseguidas por sus agencias, nos contactan cuando apenas ya no hay tiempo ni margen de maniobra para realizar procesos potentes y de calidad. Llegados a ese punto sólo les podemos ofrecer o bien nuestro Proceso Simplificado, con buenas opciones pero muy limitadas; o bien un Proceso Integral, con un año sabático o gap year para el alumno. Ese es el peaje que muchas familias deben pagar si, al inicio del camino, subestiman la dificultad, la complejidad y el coste del proceso de aplicación necesarios para obtener admisiones en universidades nivel medio-alto y alto.
Puedes leer aquí lo que opinan nuestros ex-alumnos y sus familias de nosotros